CRIANZA - MAKEANDO WINES
La crianza del vino
Crianza y envejecimiento
En la elaboración de todos nuestros vinos utilizamos barricas de roble francés, de tostado bajo y grano fino. Usamos tanto barricas nuevas como usadas.
Desde el punto de vista enológico las barricas se utilizan en la crianza del vino, aportándole un diferenciado sabor al vino y mejorando el color a través de su fijación que surge como fruto de la microoxigenación.
El roble es el material más apto para la guarda del vino tanto por sus características químicas, que son responsables de los compuestos aromáticos que se ceden al vino, como físicas, mejor estanqueidad y mejor manejo.
El roble francés, tanto Quercus petraea, como Quercus robur, es más denso y su poro es más pequeño (al tener los radios de crecimiento muy juntos) y, por tanto, la evolución del vino en su interior es más lenta. En consecuencia, es perfecto para las crianzas largas.
La cantidad total de tanino que aporta al vino es bastante superior en este tipo de roble.
DJANGO
Utilizamos Barricas Selmer de Francis Miquel de tamaños 225 l y 228 l. Estas barricas proceden de la Tonelería Francis Miquel, una tonelería artesanal, en Marcellus, Francia.
Se trata de un tostado artístico: con pequeños golpes de fuego durante un tiempo prolongado. Uno de los mejores tostados artesanales del mundo. Este tostado único sin quemar la madera, busca la penetración en profundidad de nos 15 mm, de este modo se respeta el vino, la fruta y su terroir, acompañando el vino, colaborando con su estructura y entramado de taninos finos y elegantes.
Son barricas que aportan un punto atlántico que respeta la frescura, con fondo salino…